sábado, 29 de noviembre de 2008

Biografia de Francisco de Paula Gonzáles Vigil

Francisco de Paula Gonzáles Vigil

Un gran escritor francés, Emilio Zola, hizo célebre la frase “Yo acuso”, sin imaginarse que al pronunciar dramáticamente estas palabras ante los tribunales de Francia estaba repitiendo la misma frase que varios lustros antes había pronunciado un peruano ilustre ante la Cámara de Diputados.

Francisco de Paula Gonzáles Vigil, diputado por Tacna y una de las figuras más destacadas de los primeros parlamentos nacionales, lanzó en 1832 su famosa catilinaria contra el presidente Agustín Gamarra, acusándolo de haber cometido violaciones graves a la constitución del Estado y concluyó con su conocido: “Yo debo acusar, yo acuso”.

Gonzáles Vigil adquiere desde entonces una visible notoriedad y se consagra como el abanderado en la defensa de la libertad y de la constitución convirtiéndose en uno de los pilares de la república en el apogeo de la anarquía y el caudillismo. Este gran patriota nació en Tacna, el 13 de septiembre de 1792, después de hacer sus primeros estudios en su ciudad natal, Gonzáles Vigil, muy joven aún, pues sólo tenía 11 años, fue llevado al seminario conciliar de San Jerónimo de Arequipa, centro en el que se le había otorgado una beca. Allí encontró la guía espiritual e intelectual del célebre obispo Pedro José Chávez de la Rosa, que aunque nacido en Cádiz, formó varias generaciones de patriotas.

Las ideas liberales y avanzada del obispo encontraron un campo fértil en el joven estudiante. Así comenzó a formarse el espíritu rebelde, intranquilo y ávido de reformas sociales y políticas pero al mismo tiempo respetuoso como nadie de las libertades públicas y de la constitucionalidad.

En 1811 era pro-secretario del seminario y se gradúa como presbítero en 1819. En el citado centro de formación llegó a ser catedrático y rector, pero antes de hacerse presbítero se dirigió a la universidad de San Antonio Abad, doctorándose en Teología el 12 de setiembre de 1812.

Gonzáles Vigil llegó al parlamento en 1825, representando a la provincia de Arica y en sus primeros años pasó casi desapercibido, dándole a notar ocho años más tarde cuando pronunció su arenga contra Gamarra. Pero parece como si su auténtica vocación se hubiera resuelto en el Congreso, porque es aquí donde realizó su gran obra de bien nacional por espacio de treinta años.

Gonzáles Vigil, que fue también en más de una oportunidad director de la Biblioteca Nacional, murió el 9 de junio de 1875, dejando un ejemplo de rectitud, honestidad y respeto a la ley, virtudes por las que luchó toda su vida.


Hipolito Unanue


José Hipólito de Unanue Pavón (*Arica -Tacna -Perú, 13 de agosto de 1755 - † Cañete, 15 de julio de 1833), médico y precursor peruano, reformador de la medicina y fundador de una escuela médica muy relevante de la época, conocida como San Fernando.

Fue catedrático de anatomía en la Universidad de San Marcos de Lima, donde estudió con Gabriel Moreno, también reformador médico. En 1784, inauguró lecciones públicas; en 1792 fundó el anfiteatro anatómico en el Hospital de San Andrés;entre 1791 y 1794 fue director de "El Mercurio Peruano", revista clave para la difusión de nuevas ideas en el Perú.

Fue miembro de la Sociedad Amantes del País, creada por el virrey Amat y Juniet. El mismo virrey que inauguró la Plaza de Toros de Acho de Lima.

En 1805 publicó su obra maestra: Las observaciones sobre el clima de Lima, en la que rebatió cualquier noción de contagio de las enfermedades, optando por una teoría puramente ambiental según la cual las medicinas no tendrían eficacia universal, sino que habrían de ajustarse a los climas locales.



Nació en la ribereña ciudad de Arica, el 13 de agosto de 1755, sus padres, don Antonio Unánue de Montalivert y doña Manuela Pavón y Salgado, descendientes directos de españoles peninsulares, no contaban con grandes recursos económicos; por el contrario, su padre -unos días antes del nacimiento- había quedado en las lindes de la miseria por la pérdida de una embarcación que constituía su única fuente de ingresos.

Por vinculaciones familiares con el clero, Unánue se inclina por el sacerdocio; en consecuencia, viaja a Arequipa e ingresa al Seminario de San Jerónimo en donde cursa Humanidades, Filosofía y Principios de Jurisprudencia.

Hacia 1777 se traslada a Lima donde pone de relieve, en poco tiempo, su verdadera inclinación: las Ciencias Naturales. Encontró el estímulo oportuno de parte de su tío, profesor de Anatomía dedicándose entonces, con ahínco y entusiasmo a la preparación para la carrera de médico, no muy promisoria en aquellos tiempos y en el medio en que le tocaría vivir. Pero, la necesidad de subsistir a sus propias expensas lo llevó a colocarse como preceptor en casa de don Agustín de Landáburu, uno de los más ricos hacendados de la capital. Aquí, el joven Unánue se fue relacionando con miembros de la alta sociedad limeña, que habrían de brindarle su amistad al descubrir en él los dotes brillantes que poseía y que cultivaba con tanta dedicación y esmero, y que iban a constituir más tarde su mejor clientela en el ejercicio de la medicina.

En 1783 se graduó de Bachiller en medicina, prestando juramento en diciembre de 1786 en la capilla de la real Universidad Mayor de san marcos, en cuyo profesorado ingresaba 2 años más tarde con la cátedra de "Método de Medicina". Contribuyó a la formación de la sociedad académica de Amantes del País (1790), en cuya publicación, El Mercurio Peruano, empieza a escribir bajo el seudónimo de "Aristo". Los temas del Mercurio Peruano son diversos y de un interés notable. Unánue contribuye con artículos cuya importancia ideológica se anuncia en la "Idea General del Perú" aparecida en su primer número.


HIPÓLITO UNANUE


Nació en la ribereña ciudad de Arica, el 13 de agosto de 1755, sus padres, don Antonio Unánue de Montalivert y doña Manuela Pavón y Salgado, descendientes directos de españoles peninsulares, no contaban con grandes recursos económicos; por el contrario, su padre -unos días antes del nacimiento- había quedado en las lindes de la miseria por la pérdida de una embarcación que constituía su única fuente de ingresos.

Por vinculaciones familiares con el clero, Unánue se inclina por el sacerdocio; en consecuencia, viaja a Arequipa e ingresa al Seminario de San Jerónimo en donde cursa Humanidades, Filosofía y Principios de Jurisprudencia.

Hacia 1777 se traslada a Lima donde pone de relieve, en poco tiempo, su verdadera inclinación: las Ciencias Naturales. Encontró el estímulo oportuno de parte de su tío, profesor de Anatomía dedicándose entonces, con ahínco y entusiasmo a la preparación para la carrera de médico, no muy promisoria en aquellos tiempos y en el medio en que le tocaría vivir. Pero, la necesidad de subsistir a sus propias expensas lo llevó a colocarse como preceptor en casa de don Agustín de Landáburu, uno de los más ricos hacendados de la capital. Aquí, el joven Unánue se fue relacionando con miembros de la alta sociedad limeña, que habrían de brindarle su amistad al descubrir en él los dotes brillantes que poseía y que cultivaba con tanta dedicación y esmero, y que iban a constituir más tarde su mejor clientela en el ejercicio de la medicina.

En 1783 se graduó de Bachiller en medicina, prestando juramento en diciembre de 1786 en la capilla de la real Universidad Mayor de san marcos, en cuyo profesorado ingresaba 2 años más tarde con la cátedra de "Método de Medicina". Contribuyó a la formación de la sociedad académica de Amantes del País (1790), en cuya publicación, El Mercurio Peruano, empieza a escribir bajo el seudónimo de "Aristo". Los temas del Mercurio Peruano son diversos y de un interés notable. Unánue contribuye con artículos cuya importancia ideológica se anuncia en la "Idea General del Perú" aparecida en su primer número.

Fue creador del Anfiteatro Anatómico de la Universidad de San Marcos y lo inauguró el 21 de noviembre de 1792. Esta tarea cumplida terminó por encumbrarlo definitivamente dentro del ambiente intelectual limeño. Era por entonces una de las figuras más respetadas entre los estudiosos de la época. Al año siguiente es nombrado Cosmógrafo Mayor del Reino y edita la "Guía Política, Eclesiástica y Militar del Virreinato del Perú (1793 - 1797). En oposición a las teorías de los naturalistas europeos sobre las condiciones de la naturaleza americana, publicó "Observaciones sobre el clima de Lima y su influencia en los seres organizados, en especial el Hombre" (1805), que por sí solo constituyó una comprobación de la madurez intelectual de los peruanos. Atento a su prestancia, el virrey Fernando de Abascal solicitó su consejo, lo nombró Protomédico General el 29 de noviembre de 1807, y facilitó, con su protección, que se realizara el sentido anhelo de Unánue de crear y poner a funcionar la Escuela de Medicina. En un primer momento obtuvo la cesión del viejo hospital de Santa Ana, mientras se llevaba a cabo la construcción de un edificio propio. A sus propias expensas costeó por su parte, la dotación de enseres e instrumentos para el nuevo local que también contó con el apoyo altruista del gobierno, del alto clero y de familias y personas pudientes de la capital e interior del país. El virrey asistió dándole solemnidad al acto, a los primeros exámenes del curso de Anatomía, Fisiología y Elementos de Zoología. Para agradecer al mandatario su cooperación decisiva, se dio en llamar a la Escuela de Medicina, Escuela de San Fernando.

No obstante su proximidad al gobernante, colaboró en periódicos calificados de "oposición" como el Verdadero Peruano y El Satélite Peruano; y elegido diputado a Cortes por Arequipa, viajó a España y visitó al monarca para gestionar privilegios requeridos por el Colegio de Medicina; declinó el Título de Marqués; y para sí aceptó únicamente un óleo de la Virgen de la Asunción que el rey tenía en una salita, así como el nombramiento como Médico de la Real Cámara (1815). Asimismo, logró, que por Real Cédula del 9 de mayo de 1815 fuera aprobada la existencia del Colegio Médico de San Fernando. Regresa a Lima al año siguiente para dedicarse a sus tareas profesionales, docentes y asistenciales, pero, en busca de reposo, debe trasladarse a Cañete, desde donde -ya en 1820- vuelve a la capital, llamado por los sucesos que avecinan para la suerte del país: la próxima emancipación. A solicitud del virrey, actuó como secretario de la delegación que en Miraflores se entrevistó con los emisarios del General don José de San Martín. Proclamada la Independencia del Perú, Unánue ocupó el Ministerio de Hacienda.

Para el nuevo Congreso, Unánue es elegido representante por Puno y como tal es Comisionado para intercambiar ideas con el Libertador Simón Bolívar que recién había arribado. La labor de Unánue en el Congreso Constituyente fue infatigable y fecunda y con esa mística de servicio se dio por entero a participar en los trabajos de la comisión encargada de redactar el proyecto de Constitución de la República con otros miembros de la Cámara.

En enero de 1824, Unánue acude como médico al lado del Libertador Bolívar cuando éste se encuentra seriamente afectado de salud en el histórico sitio de Pativilca. Así, continuó con su carrera política en la nueva patria independiente hasta su muerte en Lima en 1833.

Hipólito Unánue fue de personalidad polifacética, como médico, físico y estadista. Su vida y obra, ampliamente conocidas a través de la historia, han concitado sumo interés entre historiadores y biógrafos, quienes han dado a conocer las sobresalientes cualidades personales y profesionales del recordado sabio y precursor de nuestra independencia.

En 1994 la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Federico Villarreal adoptó el nombre de "Hipólito Unánue" como homenaje a este ilustre médico y héroe peruano.



Obras de Hipólito Unanue:

UNANUE, Hipólito, 1755-1833 “Obras científicas y literarias”, Barcelona: La Academia de Serra Hnos. y Russell. 1914.

UNANUE, Hipólito, “Observaciones sobre el clima de Lima y su influencia sobre los seres organizados en especial el hombre.” /Introd. y comentarios por el Dr. Carlos Enrique Paz Soldan. Lima : Comisión Nacional Peruana de Cooperación Intelectual. 1940.

UNANUE, Hipólito, Colección documental de la independencia del Perú “Los ideólogos”, Hipólito Unanue, Vol 7, Lima, Comisión del Sesquicentenario de la independencia del Perú, 1974.

UNANUE, Hipólito, “Los ideólogos”, Hipólito Unanue, Vol 8, Lima, Comisión del Sesquicentenario de la independencia del Perú, 1974.

EL MERCURIO PERUANO, Biblioteca Nacional del Perú. Edición Facsimilar. Lima. X tomos, 1964, 66.



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"Estamos Resueltos A Resistir Con Toda La Seguridad De Ser Vencidos, Pero Es Preciso Cumplir Con El Honor Y El Deber" Desde Nuestra Pobre e Ignorante Intelectualidad Urbana, Casi Pedernaria. elevamos nuestra voz de protesta por la Indiferencia y Maltrato de la Nación Peruana hacia Tacna.((QUE MAL CIUDADANOS PERUANOS,QUE MAL))

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